martes, 11 de septiembre de 2012

Ahora si sé que aquello si fue un error.


¿Te acuerdas de ese gran día que pasamos tu y yo?, Claro que te acuerdas. ¿Cómo olvidarlo? ese día, yo lo di todo, y tu, sabías que yo lo estaba dando todo, y derrepente¡ZAS! me la clavas por la espalda, sin yo enterarme, atacaste de la manera más tierna, y aceptable, pero son de aquellas cosas que a la larga desgraban, y te hunden a lo largo del tiempo, Seré pequeño, si, pero con más imaginación que nadie, con sueños y fantasías que jamás se acaben, y a la larga, que sean fuertes y aguanten. Y mientras tanto, estaré pendiente de ti, y de aquello que me hiciste, porque ahora mismo lo llevo como una carga, sintiéndome culpable. Tuve suerte de a verte conocido¿Suerte? eso mejor dejemeselo al destino. Igual ahora mismo no estés leyendo esto, ni te importe una mierda lo que escribo, pero paso, y afróntalo con sigilo. Te repito, los sueños más dulces son en los que se comen chuches, sé que te acuerdas de aquellas que nos comimos.



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